Hoy, 1 de Mayo, es el Día Internacional de los Trabajadores, conmemoración del movimiento obrero mundial. El origen de este día se encuentra en 1886, cuando un primero de Mayo cientos de miles de hombres y mujeres trabajadores, formaron parte de una huelga y de días y días consecutivos de lucha en las calles, para lograr la ansiada jornada de 8 horas.
En la actualidad, el 1 de Mayo es festivo internacional, pero consideramos que más que un día de fiesta, debe seguir siendo un día de lucha y reivindicación ya que 133 años después, aún nos queda mucho por conseguir en cuanto a derechos laborales y sociales se refiere.
Diariamente vemos cómo la juventud está expuesta a unos trabajos precarios con unos sueldos ínfimos o cómo deben organizar su tiempo para compaginar los estudios con un trabajo debido a los altos precios en el sistema educativo. Debemos destacar también la relegación de las mujeres a trabajos invisibilizados, con condiciones laborales indignas y pésimamente remunerados, en los que se refuerzan el trabajo reproductivo y de cuidados propios de un sistema capitalista y patriarcal. Para las mujeres, acceder a un puesto de trabajo en unas condiciones dignas es un camino lleno de obstáculos: se ponen en duda nuestras capacidades, nuestra remuneración es menor debido a los puestos que ocupamos e incluso llegamos a sufrir acoso en nuestros puestos de trabajo.
Sabemos que nadie nos va a regalar nuestros derechos, por los que estudiantes y obreras debemos salir de la mano a las calles para conseguirlos mediante la lucha estudiantil y obrera.
Por ello, este 1 de Mayo, debe ser una jornada de lucha, reivindicación y de recuerdo a todas aquellas personas que años atrás han luchado por un futuro digno. Este 1 de Mayo ¡sal a la calle!
Nuestras voces serán escuchadas. ¡Mujer trabajadora, mujer luchadora!